Aunque esta noticia no es reciente, pues se generó cuando Barack Obama asumió la presidencia, vale la pena recordar que el sueño de este mandatario es que la Casa Blanca tenga las características de una edificación sostenible y pueda ser certificada con LEED.
Al poco tiempo de entrar en la Casa Blanca, el Presidente Obama le expresó a Barbara Walters su intención de ser un ejemplo para Estados Unidos en cómo vivir de una manera más amigable con el medio ambiente. “Cada uno de nosotros tiene un papel importante frente al ahorro de energía. Parte de lo que yo pretendo mostrar al pueblo estadounidense no es muy difícil de cumplir”. La familia Obama comenzó a poner en práctica lo dicho: Michelle Obama sembró una huerta con hierbas aromáticas y hortalizas en el jardín sur.
La actual familia presidencial de Estados Unidos no es la primera en interesarse en este tema. En 1979, el presidente Jimmy Carter mandó instalar un calentador solar de agua en el techo del Ala Oeste, y el presidente George W: Bush mandó también a instalar un pequeño sistema fotovoltaico y dos sistemas más de calentadores solares de agua.
Obama quiere ir más allá y dentro de sus planes contempla que la Casa Blanca sea lo más verde que jamás haya sido y que logre los requisitos para una certificación LEED .
Convertir una casa en una vivienda con parámetros de sostenibilidad es una tarea difícil, pero con el estatus histórico y la seguridad que ha requerido la Casa Blanca, la familia Obama tiene parte del camino recorrido. Rick Fedrizzi, presidente y CEO de USGBCconsidera que la certificación LEED de la Casa Blanca es absolutamente posible y viable.
La vocera del Concejo para Calidad Ambiental (CEQ, por sus siglas en inglés) de la Casa Blanca, Christine Glutz, comenta que el esfuerzo para lograr la certificación LEED incluye sistemas de manejo de agua, energía y desechos. Así mismo es importante considerar el ciclo de vida y la toxicidad de los productos que se compran.
La huella de carbono de la Casa Blanca se puede reducir mediante la utilización de sistemas computarizados de manejo de la energía y del agua; sensores automáticos que mantengan la luz apagada en las habitaciones desocupadas; válvulas de bajo flujo de agua en los baños, cocinas y demás espacios donde se requieran.
Las pinturas y los sellantes que se utilizan deben ser con bajo o nulo contenido de compuestos orgánicos volátiles (COV). Los jardineros e ingenieros que se ocupan del mantenimiento, deben utilizar productos de limpieza biodegradables y materiales reciclados. Las ventanas tendrán una película que ayudará a filtrar los rayos UV y a ahorrar energía.
Según un artículo publicado en el sitio web de National Geographic, los materiales sobrantes de las renovaciones de la Casa Blanca y las demoliciones serán donados a organizaciones locales recicladoras.
Si el presidente Obama sigue aplicando cambios eco-amigables a lo largo de su mandato, logrará hacer de la Casa Blanca una «casa verde» con certificación LEED, demostrando y llevando a los estadounidenses a un mundo más verde.
¡Buen ejemplo a seguir!
Fuente: Ecomodus arquitectos, Sierra Club Green Home, National Geographic
Fotos: Inhabitat.com
Deja un comentario