Impulsados por este ambicioso lema de que Vancouver será la ciudad más verde del mundo en 2020, los ciudadanos y la administración se han propuesto cumplir esta meta a cabalidad. Juntos podrán construir una ciudad mejor para vivir, más sana y con mayor resiliencia económica para las futuras generaciones.
Vancouver ha ocupado, durante varios años, los primeros puestos en el ranking mundial de las mejores ciudades para vivir. Actualmente, es la líder mundial en energía hidráulica, que constituye el 90 por ciento de su oferta; además aprovecha las energías renovables como la eólica, la solar y la energía de las olas.
Gracias al excelente transporte público, a los 397 km de ciclovías, a los programas de viajes compartidos y a la enorme cantidad de zonas verdes, Vancouver tiene el más bajo nivel de de emisiones de carbono, per cápita, de cualquier ciudad importante del continente.
Parte de sus objetivos para 2020 incluyen la reducción de las emisiones en un 33%, la promulgación de estrictas normas de construcción verde (todos los nuevos desarrollos deben ser neutros en carbono) y la mejora, en un 20 por ciento, de la eficiencia energética de las estructuras existentes.
En algo que Vancouver podría mejorar es en el uso de vehículos eléctricos. La Asociación de Vehículos Eléctricos de Vancouver estima que sólo hay 20 vehículos eléctricos puros en las vías de la ciudad. Esto se debe principalmente a la disponibilidad. El Chevy Volt acaba de entrar a Canadá así como el Nissan Leaf. Aunque actualmente sólo hay 15 estaciones de carga previstas, las autoridades municipales planean más para el futuro y se espera que los vehículos eléctricos sean el 15 por ciento de las ventas de vehículos nuevos en Vancouver para 2020.
Tomado de talkgreenvancouver.ca