La multinacional suiza Schindler, fabricante de ascensores y escaleras mecánicas, ha puesto en marcha la instalación del primer ascensor que trabaja con energía solar, que ahorra hasta un 50 por ciento más que un ascensor común en un año.
Este ascensor solar funciona con placas fotovoltaicas, con energía eléctrica o con la combinación de ambas. El desplazamiento de este modelo puede ser “completamente independiente” en su funcionamiento y en su fuente de alimentación: la luz solar.
También aporta importantes beneficios, gracias a su instalación, de acuerdo a un estudio previo del tráfico del edificio, ya que los paneles solares ubicados en la parte superior del ascensor son “lo suficientemente grandes como para suministrar energía a su mecanismo en periodos de luz menos intensa”. La energía que entra a los paneles solares puede ser «empleada inmediatamente, almacenada en baterías o reutilizada por la propia red».
Schindler posee una “ventaja única” pues el aprovechamiento de la energía solar almacenada “asegura la continuidad de su funcionamiento, disminuyendo la posibilidad de que los pasajeros se queden atrapados en el ascensor”, sobre todo en lugares que sufren de frecuente cortes de energía.
Con la información de: ecoticias.com
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